martes, 18 de noviembre de 2014

Otoño; como vienes, te vas...

La necesito tanto como ella me necesita a mí. Otoño va creando suspiros vacíos que se pierden con el aroma de sus pasos.
Ella es áspera como la vejez y frágil como la barrera de mi cordura.

Su voz se clava como alfileres; capaz es de matar la inocencia de un recién nacido. Mujer, que haces caso omiso a las súplicas y críticas. Que tienes la fuerza de un desgarro, que por ti muere el infinito.

Y como vienes, te vas. Así vuelves a empezar.
Vuelve a mí.

9 comentarios:

  1. Que bonito!!!
    Un saludo
    http://estamananayotroscuentos.blogspot.com.es/

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  2. Que lindo leerte, che! No me doy cuenta si te sigo o no pero de una tenes una seguidora nueva si ya no lo hago. Hermoso todo.

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  3. Supongo que el día en que alguna entrada tuya no me guste nunca vendrá, y me alegro mucho por ello.
    Grande como siempre Anthony
    Un beso

    www.humanfilters.blogspot.com

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  4. Qué precioso texto :)
    Por cierto he nominado a tu blog porque es increíble
    http://mylifeenpocaspalabras.blogspot.com.es/2014/11/nominada.html

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  5. Preciosas líneas, Antony, como siempre, y llenas de sentimiento. Un abrazo.

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